El miedo es una sensación de angustia que se produce ante la percepción de una amenaza. Esta amenaza puede ser real o no.
Es muy importante dejar claro que no hay nada que en verdad sea una amenaza en sí mismo, aún cuando siempre lo es para alguien, y depende de los recursos que ese alguien tenga para enfrentarlo.

Si observamos con detenimiento y sin prejuicios, encontraremos que el miedo es una señal que indica que existe una desproporción entre la magnitud de la amenaza a la que nos enfrentamos y los recursos que tenemos para resolverla.

En realidad el miedo no es el problema, sino más bien éste nos está indicando que existe un problema.
Por lo que el error es convertir en el problema lo que en realidad es una señal que nos indica la existencia de una situación problemática.

Debemos aprender a aprovechar la emoción del miedo como la luz roja del semáforo,que nos está indicando que hay algo que no esta funcionando al ciento por ciento en nuestro interior.